Translator

English plantillas curriculums vitae French cartas de amistad German documental Spain cartas de presentación Italian xo Dutch películas un link Russian templates google Portuguese Japanese Korean Arabic Chinese Simplified
Mostrando entradas con la etiqueta 07 New Zealand. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta 07 New Zealand. Mostrar todas las entradas

9 de febrero de 2012

Verde, verde y más verde. De vuelta...

Verde, verde y vacassssss

De vuelta hacia Auckland..., hemos vuelto por la costa oeste y hemos atravesado ciudades similares a las ya vistas, así que no voy a detallarlas una por una. Lo que si es impresionante es como todo a nuestro alrededor es verde, verde y más verde, por dónde mires. Normal que sea el país dónde hay más ovejas, vacas, y caballos. De todo este trayecto, destacaría Wanganui, a orillas del río y que si conduces bordeándolo, puedes disfrutar de unas vistas impresionantes.
Bridal Veil Falls
Wanganui
Waitomo, célebre por sus cuevas, en las que puedes hacer desde rapeles hasta rafting, pero que tienswe unos precios tan desorbitados que es imposible poder hacerlas (200$/pp). Pero sin duda, el sitio que más nos ha gustado de este trayecto, es Raglan, una ciudad pequeñita, en la desembocadura del río al mar de Tasmania. Las vistas son increíbles, y las playas de arena negra perfectas para pasear, si el tiempo acompaña (que no ha sido nuestro caso). Además tiene un ambiente surfero perfecto. También tiene cerca unas cataratas (bridal veil falls), vale la pena visitarlas ya que tienen unas vistas increíbles.
Una de las cosas que también nos sorprende, es como cambia el paisaje en cuestión de segundos, puedes ir circulando por carreteras donde no hay nada y de repente tras una curva meterte en un bosque de vegetación super densa y al segundo ir circulando entre montañas, es increíble!!!
Bosque en Te Kuiti
Respecto a los sitios dónde dormir, hemos tenido de todo un poco, a veces las guías nos mandaban a lugares perdidos por ahí, lejos de todo, dónde no se veía ni un alma, así que hemos ido improvisando (gracias a Alber), y nos ha salido bastante bien. En Te Kuiti, encontramos una reserva para dormir, un sitio chulísimo dónde pudimos hacer una mini excursión por dentro de un bosque húmedo y precioso, para ver unas cascadas, además de poder disfrutar de unas patatitas asadas que nos hicimos en las barbacoas que había en la reserva. Lo único malo de todos estos sitios, era encontrar un sitio dónde poder ducharse, no es tan fácil. De hecho, acabamos duchándonos en la piscina pública (menos mal que Alber no tiene vergüenza, porque yo aún estaría usando las toallitas húmedas). De todas maneras al final hemos tenido que dormir en holidays parks y pagar porque no es tan fácil encontrar sitios gratis y decentes.
Una de las cosas que más nos están sorprendiendo de todos los neozelandeses, es que ¡¡van descalzos!! a todas partes: al colegio, por la calle, por la montaña... la verdad es que se ahorran una pasta en calzado, es brutal y súper curioso. Los niños se acostumbran ya de pequeños, supongo para que se les vaya endureciendo la piel y haciendo callo, jajaja.
De picnic en Auckland Domain
Para nosotros lo mejor ha sido volver a Auckland y poder estar unos días más, sobretodo para ver gente, ya que mientras hemos ido visitando todas estas ciudades del norte, nos ha dado la impresión de que estaban vacías, no sabemos dónde estaría la gente, pero por las calles no se veía un alma, por no decir que las tiendas e incluso bares cerraban a las 5, así que nos daba poca opción para hacer nada. Cuando llegamos a Aucklnad todo el entorno cambió, un montón de gente paseando por las calles, los parque llenos, vamos que necesitábamos ya ese rollito de ciudad que tanto le gusta a Alber. Visitamos el mercado La Cigale, un mercado de aire francés, con cantidad de puestos de comida, incluso uno de paella (que no nos atrevimos a probar), dónde aprovechamos a comprar pan de verdad para nuestro picnic en el parque, dónde disfrutamos de música jazz en directo. La gente adora estos acontecimientos y van más que preparados con sus mantas, sus sillas, …hasta champagne, mola muchísimo formar parte de ese buen ambiente. Para completar un día muy bueno, fuimos a Albert Park, dónde tuvimos la suerte de ver como celebran el año nuevo (el año del dragón)los miles de chinos y asiáticos que hay en esta ciudad. Fue chulísimo!!!
Año chino en Alber Park
Todo el parque estaba decorado con farolillos de colores y linternas de todas las formas y animales imaginables, además de actuaciones en directo. La verdad es que disfrutamos a tope, sobretodo Alber que adora el mundo oriental.
Otro día, aprovechando que era fiesta nacional y estaba todo cerrado, fuimos al zoo (22$/pp), para poder ver por fin un kiwi, no podíamos irnos de New Zealand si ver al menos uno (en libertad es casi imposible verlo). El zoo es bastante grande y pasamos gran parte del día allí disfrutando de los animalillos que a mi me gustan tanto.
Volvimos al city center para ir a la galería de arte (una de las pocas cosas que entras gratis), y pasamos el resto del día viendo cuadros que no entendíamos y arte moderno que aún entendíamos menos, pero había otras cosas que nos encantaron, como el edificio que por dentro es chulísimo.

Mt. Edén
Para acabar con esta ciudad que tanto nos ha gustado (a Alber la que más le ha gustado de momento), fuimos a pasear por Parnell village, una zona moderna con muchos barecitos y tiendas metidas entre callejones, y después a disfrutar de las vistas de toda la ciudad desde Mt Edén, una montaña de origen volcánico con un cráter enorme en su cima, y desde dónde se puede ver todo Auckland, un final perfecto para despedirnos.

Tenemos que decir (y nos ha servido de experiencia), que tantos días en campervan nos han parecido demasiados, añadiendo además que como no se puede dormir en cualquier parte y no hay servicios adecuados para poder ducharte, tienes que pagar de nuevo para dormir en un holiday park o similar. Otra cosa medio negativa, es que no te relacionas mucho con la gente, así que no hemos podido practicar mucho el idioma. Pero creemos también que es la única forma si quieres conocer y visitar los máximos lugares posibles.
De todo el norte, Alberto se queda sin lugar a dudas con Auckland y yo me quedo con la zona de Coromandel y la zona geotérmica que me pareció algo impresionante.
Ahora entramos en una de las etapas que más ganas teníamos que llegara: nos vamos a Australia, un sitio al que siempre habíamos soñado con ir, y que tenemos la intención de conocer lo más profundamente posible.
Ahora sólo nos quedan unas 15 horas en el aeropuerto, un pis…. Y a volarrrrr

30 de enero de 2012

Palmerston North, Martinborough & Wellington

Empieza nuestro 3er tramo...
Nuestra primera parada fue en Palmerston North, una ciudad algo más grande que el resto, pero de nuevo nos da la sensación de que está vacía. Supongo que esta tiene la excusa que es ciudad de estudiantes y ahora están de vacaciones. Lo primero que nos ha sorprendido, es que por fin hay wifi gratis en toda la plaza, genial!!!
Detalle de Palmerston
Hemos tenido la mala suerte de llegar un día que no hay ninguna actividad, ya que suele haber mercados, música, pero nosotros nos tenemos que conformar con pasear. Lo que más nos ha gustado por encima de todo, es la biblioteca. Es impresionante!! es diferente a todas las que hemos visto, es más como una galería, con distintas zonas, dónde puedes desde ver la tele, hasta hacer cookies (amas de casa) o tocar el piano. Nosotros aprovechamos para escribir blog, subir fotos y relajarnos un ratito.
Después de nuevo a buscar como todos los días un lugar dónde poder aparcar y dormir que fuera gratis. lo encontramos en Masterton, en pleno parque natural, de nuevo, con los pajaritos y el río. Vamos! igualito a los lugares dónde me decía mi padre que paráramos a dormir.
vendiendo pasteles
Seguimos camino, pasando por pueblecitos chulísimos como Carterton, dónde las mujeres vendían sus pasteles en la calle y varios ¡garage sale!, típico también por estos parajes. La verdad es que os estamos dando cuenta que estos neozelandeses, son mucho de antigüedades y de trastos viejos.
La parada que más nos gustó, de todo el tramo fue sin lugar a dudas. Martinborough, zona de vinos por excelencia. Ya ves nada más entrar en la ciudad, que estas rodeado de viñedos. Hay tours organizados que te llevan a conocer algunas bodegas, o gente que alquila bicis para hacer la ruta (las bodegas están muy cerquita de la ciudad).
wine center in Martinborough
De cata
Nosotros nos agenciamos un mapa con la situación de las bodegas y empezamos nuestra ruta. La 1ª visita fue Vynfields, dónde empezamos fuerte catando 8 vinos diferentes por 5$/pp , explicación incluída, aunque todo, todo, como que no lo entendíamos, jajaja. A la 2ª (ya fuimos con sonrisita en la boca), fue Haythorwaite, dónde todos sus vinos se llamaban como los miembros de la familia. como no, había unos con Susan, que tuvimos que probar, y hasta compramos una botella (la sangre llama). 
La última, (porque ya íbamos más bien tocaos), fue Martinborough Vineyard, que tenía el premio al mejor pinot noir del mundo, y dónde probamos de nuevo 6 o 7 vinos. La verdad es que esto de beber vinito, es un peligro, ya que tuvimos que comprar unos quesitos para acompañar las 2 botellas que compramos, y al final hicimos un roto terrible en nuestro presupuesto O-((, pero valió la pena, porque pasamos un día muy divertido.
Nuestro último destino de este tramo fue Wellington, capital de New Zealand, y la más al sur de la isla norte. 
Civic square, Wellington
La ciudad tiene zonas muy interesantes que no hay que perderse, como toda la zona del puerto, dónde ponen mercado los fines de semana y tiene muchos cafés y bares para relajarte un ratito. El domingo, hay un mercado de verduras, que tiene la curiosidad que los vendedores son todos chinos (están en todas partes). 
Museo Te Papa
Cerca del puerto está el museo Te Papa, un museo de entrada gratuita, que es grandísimo y bastante completo para no tener que pagar. Otra zona que está bien para la gente amante de los jardines, es Rose Garden, en la parte alta de la ciudad, a la que puedes llegar con el cable car, que no es muy caro (6$/pp/i/v).
Las vistas desde allí arriba no están nada mal. Una de las mejores zonas es la civic square, dónde se encuentra la biblioteca, el i-site, vale la pena visitarla (wifi gratis también). Cerca de la plaza, también está una de las calles más concurridas de la ciudad, dónde hay cantidad de tiendas y bares que están abiertos incluso el domingo.
Lo que no hay que perderse es El Parlamento, es un edificio impresionante, súper bien cuidado y limpio. Hay tours guiados (gratis) que te llevan por todos los rincones, enseñándote las salas dónde se reúnen los ministros, dónde vota, la biblioteca, etc... vale la pena, pero es mejor ir un día entre semana para ver a la gente en acción, ya que los domingos no hay ni Dios!!!

Parlamento
 Tenemos que decir que a nosotros como ciudad grande, nos gusta más Auckland que Wellington. Igual es porque al ser domingo no hemos visto la ciudad en pleno movimiento, pero en general nos ha parecido una ciudad demasiado tranquila.
Ahora empieza de nuevo la subida hacia Auckland por la costa oeste. Nos quedan aún casi 10 días para disfrutar de estos parajes. Ahora toca descansar, hacer de nuevo la cama (a Alber que no le gusta mucho, se está hartando de hacer y deshacer camas, pobre), un pis y ...hasta la próxima aventura.


27 de enero de 2012

Rotorua, Taupo y P.N.Tongariro

Matamata 

Frescos y duchaditos (tenemos que aprovechar todas las duchas que encontramos), decidimos ir hacia Matamata, dónde se rodó la película el hobbit, aunque teníamos sospechas respecto al precio que iba a costar, y así fue. Para ver las 2 o 3 casitas que quedan de los hobbits y luego tour por la granja (que a nosotros no nos interesaba mucho), nos pedían la friolera de 66$/pp. 
Me encanta la peli, pero no soy tan fanática como para gastarme el presupuesto de un día en esto, así que nos conformamos con ver los alrededores, con lo que ya te haces una idea del paisaje. Seguimos hasta Rotorua, zona de actividad geotérmica por excelencia. Al ser domingo estaba todo bastante muerto y además llovía, así que aprovechamos para conectarnos y buscar el sitio dónde podíamos pasar la noche sin gastar dinero.
Okare falls
El lugar elegido, Okare Falls, cerca de la ciudad. Es una especie de reserva. Puedes dar un paseíto de una hora dentro del bosque y ves un par de cataratas pequeñitas. El sitio es curioso, pero dónde teníamos que dormir, era simplemente el parking de allí, un poco extraño, pero bueno había un par de camper más lo que nos dejó más tranquilos. Había unos baños, que no estaban muy sucios pero que venían acompañados de todos los inquilinos del bosque, menos mal que no había luz y ojos que no ven… Lo mejor dormir con el sonido del agua de las cataratas de fondo.
Kuiran park, Rotorua
Al día siguiente, no tan frescos (las toallitas húmedas son todo un invento), fuimos por fin a conocer la ciudad, y cuando empiezas a caminar ya se nota toda al actividad térmica que hay, ya que por dónde pasas hay fumarolas de gas saliendo de cada hueco de la tierra y un olorcillo característico a azufre. Es increíble pensar todo lo que se cuece debajo de esta zona, mejor no pensarlo mucho, jajaja. 
Nuestro primer destino Kuiran Park, un parque enorme e increíble ya que por todas partes hay piscinas de agua o lodo hirviendo y fumarolas de vapor, para flipar, no os imagináis la cantidad que hay de verdad. Seguimos caminando hacia la parte frontal del Lago Rotorua, y por donde caminas hay fumarolas de vapor, que salen del suelo, alcantarillas, por las orillas del lago, vuelvo a decir que es increíble. El lago es precioso, con patos, cisnes y miles de gaviotas. Se pueden hacer infinidad de deportes acuáticos (no es nuestro caso). Tiene, como por toda New Zealand unas zonas verdes súper cuidadas dónde todo el mundo juega con los niños, toma el sol, en fin, se relaja. Igual que nosotros y el resto de personas con campervan,  aprovechamos todos estos espacios para comer y tirarnos un rato. Siguiendo nuestro paseo, llegamos a los jardines gubernamentales, que no hay que perderse. Son preciosos. Dentro además está uno de los edificios más bonitos de Rotorua; el museo. El entorno es genial con flores, árboles y para variar alguna que otra piscina hirviendo o fumarola. Al museo no entramos, no era muy caro, 18$/pp, pero tenemos que priorizar, así que nos quedamos con las vistas de todo el jardín. Una cosa que nos ha llamado la atención, es que para ser pleno verano, no hay mucha aglomeración de gente, de hecho está más bien vacio, y eso que Rotorua está preparado para el turismo, tiene mil bares y restaurantes (que están vacios) y muchas opciones para dormir, pero está más que tranquilo, lo que para nosotros es perfecto, aún no hemos hecho ninguna cola (ya sabéis que a Alber eso de hacer cola no le gusta nada).

Lago Rerewhakaaitu

Después de recorrer la ciudad, nos quedaba buscar un nuevo sitio para dormir.  Esta vez fuimos al Lago Rerewhakaaitu, camino hacia Taupo. Esto ya era otra cosa. Aparcamos en la misma orilla del lago, rodeado de nuevo de patos y otras aves, perfecto. Se supone que cuestan 6$/pp, que pagas al ranger cuando se pasa, o lo depositas en un sobre dentro del buzón. Nosotros pedimos perdón ya, porque no dejamos nada (ya sabéis la economía), pero creo que todos los que estaban allí  hacían como nosotros. El atardecer fue precioso con los colores del lago variando según oscurecía. Y además de gratis, qué más podemos pedir?
Nos levantamos prontito para ir a una de las tantas zonas donde puedes ver toda la actividad de la zona. Nosotros elegimos Wai-o-tapu (32,50$/pp), porque es la casa de Lady Knox, un geiser, que estalla cada mañana a las 10am (con un poco de ayuda, hay que decir), y porque tiene una de las piscinas hirvientes más grandes de toda la zona, Champagne pool, con 65 m de diámetro.

Champagne pool
Es increíble, chulísima, además está justo al lado de la Paleta del Artista, con mogollón de colores según los  elementos químicos, y puedes ver desde amarillo (azufre), rojo-marrón (óxido hierro), verde (arsénico), es brutal. La verdad es que todo el parque es precioso y puedes ver desde piscinas de agua hirviendo, cráteres, terrazas de cuarzo, cuevas y lagos de colores rarísimos. Vale mucho la pena. Después a relajarnos a unas piscinas termales que están justo en frente, y de paso darnos una duchita que ya nos hacía falta, con tanto olor a sulfuro. El sitio: Waikite Valley, y por 18$/pp, dormimos en el campsite y disfrutamos de las piscinas hasta las 12 del día siguiente. Un final perfecto para un día perfecto.

Huka falls
Nada más salir hacia Taupo, limpitos y duchados, ¡Sorpresa!, control de alcoholemia, a las 11:30am, y además te invitaban a tomar un cafecito por si estabas cansado. De camino, hicimos un par de paradas, para ver los rápidos de Aratiatia y las Huka falls, están bastante bien y además son gratis, jajaja.
Taupo, simplemente al estar a orillas del lago, ya es precioso. Además tiene unas vistas de los tres volcanes geniales (los tres activos, por cierto, sobre todo Mt.Ruhapehu, que en 1995,96 y 2007, hizo sus últimas erupciones). Taupo es también una ciudad bastante turística, llena de barecitos y restaurantes, pero lo bonito como he dicho es el lago, así que hicimos como todo el mundo: bañador, toalla y a tomar el sol al lago.
Dormimos de nuevo gratis, en una reserva a orillas del río, lo único malo eran los baños que eran horribles, tenías que entrar con mascarilla para no caer desmayados, pero bueno es lo que hay.
Nos levantamos contentos, al acordarnos que hacíamos 4 mesecitos desde que salimos de Valencia. Fuimos directamente a un café de Taupo ( ciertas cositas en la reserva era imposible hacer), aprovechamos que además tenía wifi. Listos y con las faenas hechas, nos fuimos hacia el Parque Nacional Tongariro, para ver de cerca los tres volcanes y hacer alguna caminata. La base del P.N. está en Whakapapa, un pueblecito de montaña, desde dónde salen la mayoría de rutas de trecking. La verdad es que este lugar es el paraíso para los amantes de la montaña. Nosotros que no somos mucho de esto, subimos hasta lo más alto que se podía en coche para intentar coger el telesilla hasta las pistas de ski, pero valían una pasta, 25$/pp, para no ver nada ya que el día estaba nublado.
Taranaki falls
Lo que pudimos ver, que a Alber le encantó, fue a unos locos bajando en monopatín los 6 km de bajada y curvas hasta el pueblo. Impresionante la velocidad con que bajaban, pa haberse matao!! Aunque mi chico no es mucho de caminar, decidimos hacer un mini trecking de 2 horas hasta las cataratas de Taranaki. La verdad es que el paseo fue fantástico, combinando paisaje volcánico con bosques frondosos. Perfecto, y eso que el día no acompañaba nada.
Seguimos camino hacía Ohakune, el sitio elegido para dormir, una ciudad pequeñita a pies del volcán Ruapehu (que no veíamos por el tiempo), en otra reserva en pleno Parque Nacional. De nuevo conseguimos dormir gratis, importante para nuestro presupuesto.
Aquí termina nuestro 2º tramo. Empezamos la ruta hacia la parte sur de la isla norte.
Tenemos que decir, que las vistas de esta zona, han sido increíbles, conducir por estos parajes es una maravilla. De todas maneras, como dice Alber, al fin y al cabo son paisajes y llega un momento que necesitas algo más de actividad, de visitar cosas concretas, ya sabéis que además él es bastante cosmopolita, así que creo que nuestro siguiente trayecto le va a gustar más. Pero lo dicho, las vistas son impresionantes y nos hemos llevado muy buena impresión de toda la zona.
Ahora como ya sabéis, un pis y a dormir (estos baños están bastante mejor) y  a ver, si con un poco de suerte conseguimos ver algún kiwi (pájaro),tan famoso y escurridizo, sino al final tendremos que verlo en el zoo, y no será lo mismo. Bueno chicos, lo dicho, un pis…..

22 de enero de 2012

Península Coromandel - Tauranga (entre kiwis y playas)

Nuestra super sleepervan

Empezamos esta nueva aventura  con nuestra sleepervan que hemos alquilado para recorrer poco a poco algo del New Zealand. La camper, no es de las bonitas pero hace su papel. Al final, debido a que yo soy más bien cagona, decidimos coger el seguro, ya que aquí la gente viaja sin seguro y si te dan un golpe tendríamos que pagar 2000$, así que al final lo hicimos por tranquilidad pero creo será un error.
Thames
Coromandel
Empezamos nuestra ruta, dirección la Península de Coromandel. Nuestra primera parada; Thames, un pueblecito pequeño, pero con mucho encanto, que nos parecía como sacado del viejo oeste pero moderno, con el añadido de que está en toda la costa y las vistas son chulísimas. Allí nos aprovisionamos de todo lo necesario para pasar estos días (vamos pasta, arroz, zumos, huevos y poco más). Desde allí directos a Coromandel. Por el camino empezamos a ver mogollón de criaderos de ostras en la misma orilla de playa, eran grandísimos (se nos empezaba a hacer la boca agua, jajaja). 

El pueblecito era aún más pequeño, con un puertecito y poco más. Lo bonito eran las urbanizaciones en plena montaña con sus playitas casi privadas, súper tranquilo todo. Íbamos a dormir allí, pero no encontramos ningún sitio que nos gustara y como era medio pronto decidimos seguir hacia Whitianga, GRAN ERROR. Al poco ya estaba oscureciendo y además la vía alternativa que tomamos era la leche, todo curvas, en medio de la montaña, con piedras, vamos para flipar. Llegamos por fin a Hot Water Beach sobre las 22:30 y entramos en el primer Holiday park que encontramos (como campings pero mucho más caros). No había nadie en recepción, así que como no sabíamos dónde ir, nos quedamos ahí en el mismo parking de la entrada. Por la mañana, prontito (7am), salimos escopetaos antes de que abrieran la recepción a las 8, y menos mal porque luego preguntamos y nos costaba 46 $ pasar allí la noche, para flipar, solo por aparcar y dormir…Ni de coña!!!! 

Hot Water beach
Al día siguiente nos fuimos a ver la famosa Hot water beach, que no entendíamos muy bien el porqué del nombre. Llegamos los primeros juntos con algún surfista, y nos paseamos toda la playa. Cuando volvíamos, la marea ya había bajado un poco y empezamos a ver como una nubecilla de vapor en la arena. ¿Alber, qué es eso?, cuando nos acercamos, nos quedamos alucinaos, la arena estaba hirviendo, SI,SI!! no podías estar de pie en el agua porque te quemabas. No nos lo podíamos creer. La causa, hay un río subterráneo de lava a 170º que pasa justo por ahí y cuando la marea baja enseguida calienta el agua y la arena de la superficie. Estábamos allí disfrutando, cuando empezó a llegar un montón de gente con palas para hacerse sus propias piscinitas calientes donde bañarse. En un momento se juntaron más de 100 personas haciendo boquetes en la playa. Y fue cuando nosotros nos alejamos pitando al siguiente destino;

Cathedral Cove Beach

Cathedral Cove
Cathedral Cove, en Huahi, otro paisaje impresionante que es muy difícil de explicar y  que te deja con la boca abierta por un rato. Las vistas desde el mirador son impresionantes, con todo el conjunto de islas dentro del agua.  Para acceder a la cueva, hay que andar unos 45 minutos (de subidas y bajadas), pero vale la pena. Cuando por fin llegas no sabes a dónde mirar. Hay un gran arco en la montaña que separa las dos playas y luego  grandes rocas dentro del agua, desde donde te puedes tirar, además de diferentes cuevas dentro del agua  a las que puedes llegar nadando. Es impresionante. Relajarte durante dos o tres horas con esas vistas no tiene precio….para lo demás masterd card ( aquí en New Zealand, bien llenita la Master Card, eso si)

Nuestro siguiente paso fue buscar un sitio dónde dormir, al final, después de cambiarnos porque había un grupito de fiestuqui, a un parking cerca de la playa. Eso si, no sin antes hacer una escapadita al holiday park de la noche anterior para darnos una duchita de estranjis!!! Qué gozada, con el agua calentita!!!  La noche nos deparó una sorpresita, y es que a las 6 de la mañana apareció un ranger a despertarnos y decirnos que no podíamos dormir en un sitio público y que la multa era una pasta y no sé qué más porque estaba medio dormida. Con mi cara de buena y mis pelos de loca matutinos, le dije que no sabíamos nada, que no éramos de aquí, y con mi súper acento no fue difícil de creer. La putada es que teníamos que movernos de allí, así que a las 6 ya estábamos de camino de nuevo.

Amanecer en Coromandel
Lo bueno de todo es que vimos un amanecer precioso, siempre hay algo positivo. Además nos paramos en la siguiente área de descanso que vimos a dormir un rato más esperando que nadie más nos quisiera multar y es que lo que no sabíamos es que no se puede parar uno y dormir en cualquier sitio. De hecho está prohibido. Así que ya veremos que vamos haciendo para no pagar mucha pasta además de la que ya hemos pagado por la campervan.

Kiwis

Camino hacia Tauranga, nuestro próximo destino, ya vimos que habíamos entrado en zona de Kiwis (fruta), por fin vimos de dónde crecen los kiwis (no en las bolsas de los supermercados). Crecen en una especie de parra como la uva pero más alta y más grande.
 En esta zona hay kiwis por todas partes y las plantaciones están protegidas por setos (como en los chalets), pero 5 veces más altos. De camino a Tauranga paramos en otro pueblecito pequeño, Katikati, parecido a los que habíamos visto antes. Pero con unas zonas verdes geniales, con patos, fuentes, preparado para picnics. Estaban genial. Llegamos finalmente a Tauranga, bastante más grande y mucho más turístico. Tiene una zona de playa increíble. Fuimos directamente a un punto de información, para ver si encontrábamos algún sitio barato dónde dormir, y finalmente después de mucho buscar, encontramos un sitio por 10$, Mc Laren Falls, una especie de parque natural con zona de camping, que además es precioso. Yo me quedé algo más tranquila, no tenía ganas de estar preocupada cada día de si nos iban a multar o no. Y por fin después de de dos noches iba a dormir tranquilamente.

Playa en Tauranga
Nos levantamos de hecho pasadas las 9:30 frescos como una rosa, y nos fuimos directamente al Mt Maunganui, un monte al final de la península, puedes subir hasta la cima o bordearlo enterito. Vale la pena porque se ven unas vistas geniales. Y después nuestra ración de sol diaria. La playa es impresionante, además tienes islotes que salen de la misma arena que hace que las vistas y el entorno sean fantásticos.

Cocinando en McLaren Falls
Después de esta tranquilidad fue necesario comprar unas cervecitas y un buen trozo de carne para hacerlo en una de las barbacoas que hay en el parque. Un gran final para un buen día acompañado solo del sonido de los patos, que nos acompañaban durante toda la tarde.


Puesta de sol en McLaren


Tengo que decir, que ya hemos dejado de ver orientales y ahora ya estamos viendo neozelandeses, y están de muerte, vaya nivelazo, son todos/as guapos/as. 
Ahora ya sabéis, como siempre un pis y a la cama... 

17 de enero de 2012

Auckland: ciudad de Maories y Orientales

Auckland desde la Skytower

Cambio de aires! La verdad es que teníamos muchas ganas de llegar a New Zealand y empezar de nuevo una marcha mas movidita. Hasta de perrear se cansa uno.
Llegamos a Auckland a las 5 dela mañana, demasiado pronto para ir al hostel, así que nos quedamos por el aeropuerto buscando información. La verdad es que da gusto esta ciudad, encontramos folletos, mapas de las dos islas, horarios,vamos de todo y además GRATIS. ya hacía tiempo que no nos daban nada gratis.
Para ir a la ciudad, hay varias opciones; taxis que te cobran una burrada hasta allí (75$), un transfer que nos costaba 22$ cada uno y te dejaba en la puerta, y el airbus expres (16$/p) que es el que cogimos nosotros,porque la parada estaba muy cerca de nuestro hostel. Llegamos tan pronto que aún estaba cerrada la recepción. tengo que decir que cuando llegamos al hostel, pensamos, donde nos estábamos metiendo, porque por fuera era bastante cutrecillo, pero luego la verdad es que una vez arriba la cosa cambió por completo. las habitaciones son bastante amplias,los baños están bastante limpios, y lo mejor de todo tenemos desayuno gratis y WIFI, por fin, podemos conectarnos sin gastarnos una pasta. El hostel lo llevan unos chinos, algo nada raro aquí en Auckland. Nos ha sorprendido muchísimo la cantidad de orientales que hay en esta ciudad, de verdad hay veces que piensas que estas en cualquier zona asiática en vez de aquí. Es increíble!!!!
Aunque estábamos muertos (no dormimos nada en el avión, rodeados de niños pequeños llorando para variar), decidimos dar la primera vuelta por el centro hasta tener preparada la habitación. Recorrimos la calle Queens enterita hasta el puerto, es una de las calles principales y se nota enseguida la vidilla de la ciudad (que por cierto ya echábamos de menos). 
Skytower 
Ferry building
La zona del puerto es bastante turística , llena de bares, restaurantes, tiendas, todo enfocado al turista, está muy bien para pasear y ver el ambiente. Al final del puerto, está el Fish Market, es pequeñito pero muy curioso, y donde puedes comer pescado local. Vamos que estábamos en nuestra salsa,:ambiente y comida, jajaja.
De allí decidimos subir a la Skytower, una torre de220 mts, donde hay unas vistas increíbles de toda la ciudad. Por cierto, que nos pusimos muy contentos cuando nos hicieron descuento por ser backpackers (en lugar de 28, pagamos 18 $/p),  Y entonces si que ya nos fallaron las fuerzas y nos fuimos a descansar un poco al hostel. Se nos había olvidado lo bueno de los hostels, y es que enseguida empiezas a hablar con unos y otros (aquí por supuesto en inglés) y así se nos hizo la 1 de la mañana, hablando, jajajajaja.

   
Winter Garden
de picnic
Al día siguiente, ya mas frescos, seguimos con nuestra ruta. Visitamos el Carlaw Park. Es un parque impresionante e inmenso, donde hay gente jugando al criket, hay jardines por todas partes, música en directo y mogollón de gente tirada en el césped,
                               de picnic, tomando el sol, es genial para ir a comer y pasar un buen rato.

Vistas desde el museo
Auckland Memorial Museum

Dentro del parque está el museo de Auckland desde donde también hay unas vistas excelentes.
Está curioso, sobre todo la planta baja, dedicada a la cultura maorí, incluso hacen una performance, donde pudimos ver la famosa danza Haka y otros bailes y juegos maories.

El resto del día callejeando por la ciudad, que nos encanta.
En nuestro tercer día, cometimos el error de ir al Kelly Tarlton (34$/p), una especie de acuario,que es bastante cutrecillo y además carísimo para lo que ves (menos mal que al menos el transporte para regresar a la ciudad te sale gratis). Pero bueno al menos disfrutamos de las vistas de toda la bahía, que desde allí son muy buenas. 


Tengo que volver a decir que estamos impresionados con la cantidad de orientales que hay, ¿dónde están los neozelandeses?.  
Bueno, de verdad, que nos ha gustado mucho la ciudad, está súper limpia y ofrece miles de cosas para hacer. La única pega podría ser pensar en la posibilidad de que alguno de los 48 volcanes, creo que sobre 9 activos, decidiera ponerse en marcha, UFFFFFFFF,Que Miedo!!!!!, pero por lo demás es genial. Espero que el resto de New Zealand nos de la misma buena onda.
De momento, nos hemos alquilado una campervan para recorrer todo lo que podamos de las dos islas y estamos súper emocionados, que ganas de coger la carretera e ir a nuestro propio ritmo. Tenemos 22 días por delante y un nuevo país que conocer. Ahora, nos vamos a descansar, un besito de buenas noches, un pis y a la camita........