Antes de empezar este post, quería hacer un pequeño comentario.
Cuando veáis las fotos de Machu Picchu en este blog, en el de otros amigos, en revistas, e incluso hechas por el National Geographic, os aseguro que no hacen ninguna justicia a la visión en directo. Es la cosa más espectacular que podáis imaginar. Nosotros nos quedamos con la boca abierta y aún seguimos muy impresionados. Perdonad el resto de lectores, pero, Natalia y Fuen, ya estáis tardando en venir.
Una pequeña muestra.
|
BRUTAL |
Después de esta introducción, ya puedo empezar.
|
Antes de empezar |
Traíamos reservado desde Valencia, el famoso Camino Inca, un trekking de 4 días que va desde Ollantaytambo hasta Machu Picchu (40 kms aprox). La verdad es que no habíamos recopilado mucha información y tampoco nos la habían dado, así que todo iba a ser nuevo para nosotros. El primer día a eso de las 7 de la mañana nos recogieron en un bus y nos fuimos junto con Robert y Marianne (1 austriaco y 1 alemana encantadores, a los que mandamos un besazo desde aquí) y Bruno (nuestro guía) dirección a Ollantaytambo donde nos encontramos con nuestro grupo de cocinero y porteadores. En total eran 4, y se encargaban de llevar entre otras cosas, la cocina, el gas, las tiendas, sillas, mesa, comida (incluido huevos) y un largo etc.
|
Porteador |
|
Porteador |
Una vez que estábamos todos, y después de pasar una especie de control de aduana, empezamos esta locura.
Los porteadores iban delante, muy delante. Cuando llegábamos a comer, merendar o dormir, ellos ya estaban allí con todo montado y preparado. Un trabajo brutal que hay que ver en directo. Cargaban con 20 kgs como mínimo cada uno y nosotros con 5 o 6 y además se reían y lo pasaban bien haciendo su trabajo (Igualito que nosotros en España). Durante estos días hemos probado muchos platos típicos.
|
A 4200 mts. |
|
En pleno bosque |
El primer día fue bastante bien, unas cuatro horas de andar en todo el día, pero llego el segundo, donde debíamos alcanzar un paso a 4200 msnm, y fue realmente duro, ahora no lo repetiríamos ni cobrando. Además una vez llegamos a la cima, nos esperaba una bajada con un desnivel de 1000 mts y lloviendo. "Pa haberse matao". Ya nos faltaba menos para llegar a Machu Picchu. Ese era nuestro único pensamiento. El tercer día cambió todo bastante, pasamos de un paisaje de montaña a uno de medio bosque medio jungla, había menos subidas y el camino era más sencillo, por llamarlo de alguna forma, pero los dolores en las piernas, nos mataban. Aunque lo importante es que ya faltaba menos.
|
A las 5h de la mañana |
|
No se veía nada |
El cuarto día, nos levantamos a las 4 (no es ninguna locura, ya que todos los días nos acostábamos a las 20h, justo después de cenar), desayunamos, nos despedimos de nuestros porteadores y comenzamos la última caminata directos a la Puerta del Sol, donde esperábamos tener esas vistas que aparecen en todas las postales, pero la sorpresa fue grande y mala, cuando llegamos, estaba completamente nublado y no se veía nada. Esperamos una media hora para ver si despejaba, pero no fue así y decidimos bajar hacia la ciudad de Machu Picchu y justo cuando comenzamos a movernos, se abrieron las nubes y nos dieron paso a unas imágenes que jamás olvidaremos.
|
Comienza el espectaculo |
Después de esta alegría, comenzamos la bajada hacia la ciudad para visitarla y conocer algo de su historia, os vuelvo a repetir que es espectacular. No esta restaurada y solo faltan los tejados de paja en las casas.
Pasamos gran parte de la mañana allí, hasta que decidimos bajar a Aguas Calientes, donde íbamos a comer (probamos la alpaca a la parrilla, que sabe parecido a la ternera) y darnos un baño en unas termas que hay en este pueblo. Hacía 4 días que no nos duchábamos y no se nos acercaban ni los mosquitos. Cuando acabamos con ese merecido baño, nos dimos un paseo por el pueblo (pueblo pintoresco y super turístico, parecido a los de las estaciones de esquí), para después coger un tren hasta Ollataytambo y luego un bus hasta nuestro hostel en Cusco. Necesitábamos un colchón blandito,donde posar nuestros doloridos cuerpos. Hoy aún nos cuesta movernos.
|
Aguascalientes |
Una vez vivida esta aventura-locura, estamos encantados, pero quizás con la información necesaria en el momento oportuno, no la hubiéramos hecho de esta forma, sino que hubiéramos hecho la opción corta de 2 días.
Moralejas: Hay que informarse muy bien antes de pagar nada y Manolete si no sabes torear, pa que te metes.
Y con todo esto os remplazamos al próximo post, donde seguro, habrá más aventuras que contar y ya sabéis, después de cenar, un pis y a la cama.
Post dedicado en especial a nuestro amigo Carlos Mauricio González Colmenero. Que pases un feliz 40 cumpleaños. Un besazo desde Perú.